AYUNO

AYUNO

RECUERDA!!  El otoño  nos habla de renovación, de desacelerar el ritmo, nos invita a soltar, a limpiar y purificar nuestros cuerpos y mentes, para dar cabida a NUEVAS emociones en nuestra VIDA.

Por eso es el momento OPORTUNO para el ayuno y si es en compañía mejor.

APROVECHA este es TU  MOMENTO.

Por milenios el Ayuno y la Meditación han sido las herramientas más efectivas para esto.

El Ayuno limpia tu cuerpo y la Meditación tu mente.

En todas las religiones, el concepto espiritual está muy unido al ayuno. El no comer hace que nuestra consciencia aumente. Cuando no comemos, toda la energía que no gastamos en el metabolismo de la digestión se eleva, ayudando en el proceso de consciencia, del darte cuenta.

Unas curiosidades.

El ayuno completo o parcial ha sido utilizado en Siria, Babilonia en muchos lugares del planeta tierra, en el norte en el sur, en oriente y en occidente en momentos de gran curación o momentos de aquietar la mente. En Egipto los candidatos a la iniciación, en los misterios de ISIS y Osiris hacían siete días de ayuno.

En Grecia hacían ayunos de siete y nueve días

Sócrates y Platón ayunaban regularmente unos diez días.

Para entrar en la escuela Pitagórica, solamente entraban iniciados, que tenían que ayunar. Primero fortalecían la voluntad a través de los ayunos y todos los que pasaban la prueba del ayuno eran iniciados.

Las sacerdotisas del templo de Delfos antes de ir a interpretar el oráculo hacían 24 horas de ayuno, porque en ese momento, la consciencia estaba más despierta.

Buda practicaba ayunos en el camino hacia el conocimiento interior.

Los padres del desierto que eran místicos, profundamente espirituales tenían este conocimiento: No comas antes de tener hambre. No te acuestes antes de tener sueño, y no hables antes de ser preguntado

El ayuno no es nada nuevo, lo hacen los niños, y los animales, cuando están enfermos. Un animal cuando está enfermo deja de comer. No necesita digerir, porque lo que necesita es descargar, necesita desintoxicar, necesita eliminar, para que el proceso de curación se ponga en marcha.

El ayuno no es lo que te alivia la enfermedad, el ayuno verdaderamente no es el que te cura, ES EL CUERPO EL QUE SE CURA MIENTRAS ESTA AYUNANDO. Es el cuerpo el que pone todas las capacidades de auto curación para que todas las células se vayan desintoxicándose, se vayan regenerando, vayan curándose. En vez de gastar energía en la nutrición, el movimiento, lo que hago es introducir esa energía hacia la curación.

En el ayuno se sensibilizan los sentidos, se ve mucho más, se escucha mucho más, se olfatea más, se huele más, eres más sensible al tacto y no digamos al gusto. En el momento que estamos ayunando se destapan emociones, cuando comes mucho tapas las emociones que no quieres ver de ti, y en el momento en que quitas los alimentos, aquellas emociones surgen de tu interior.

Om Shanti